El agostamiento, diciembre 2014
Este año volvemos a mostrarte el agostamiento de la vid, que está siendo complicado debido a las altas temperaturas del otoño. Como puedes observar en las fotografías, en pleno mes de diciembre existen algunos brotes en el viñedo e, incluso, ha llegado a brotar algún racimo.
Este otoño hemos tenido un nivel de lluvias razonable y temperaturas superiores a lo normal, lo que ha provocado una explosión vegetal en los suelos propia de la primavera. En las fotografías podemos ver tréboles, leguminosas y crucíferas. Y una gran alfombra verde llena de flores que está atrayendo una gran variedad de insectos que no esperábamos hasta marzo.
El cambio climático
Desde Bodegas Robles queremos hacer una pequeña llamada de atención, ya que cada vez nos resultan más evidentes los efectos que el cambio climático está causando en las sucesivas cosechas: floraciones y vendimias cada vez más adelantadas, episodios meteorológicos extremo (picos de temperaturas altas y bajas), periodos de sequía más largos rotos por lluvias torrenciales, el «estrés por temperatura» de las plantas, la aceleración y desfases en la maduración, etc.
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Y, ¿qué es el agostamiento de la vid?
Al igual que nosotros, la naturaleza necesita su tiempo de descanso para tomar fuerzas y resurgir con más vitalidad en la próxima cosecha
El angostamiento es un camino hacia la fase latente invernal. El pámpano pasa de ser un brote herbáceo a ser un órgano leñoso llamado sarmiento.
pampanitos verdes,
hojas de limón.
Las condiciones atmosféricas conducen a una menor actividad en la planta y se ralentiza la absorción de nutrientes por parte de las raíces. Las hoja se vuelven color tabaco y llega un momento en que caen, ya que les abandona la savia, que retorna hacia el tronco.
Mientras tanto, el suelo de nuestro viñedo vive uno de sus mejores momentos, con el nacimiento de hierbas, flores y leguminosas con sus respectivos insectos, pólenes y levaduras. Esta gran biodiversidad es una forma natural de control de plagas y contribuye a enriquecer y hacer más complejos los sabores y aromas del vino.
En breves fechas, los amadrinados nos encontraremos en el viñedo para la poda de invierno. Esperamos que, como otros años, nos volvamos a encontrar. Es ya un rito, nuestro rito.
